jueves, 10 de septiembre de 2015

Como hacer un compostador





En el artículo anterior hemos visto la definición de lo que es el compost, pues bien, ahora nos toca ponernos a fabricar un compostador para aprovechar los desperdicios de nuestras cocinas, jardines, animales, etc.


Hay muchas maneras de hacer un compostador, la forma más sencilla y que no lleva ningún coste sería hacer una montaña de desechos en una zona del jardín en la que no nos estorbe, yo usé esta manera en la casa en la que vivía anteriormente, pues había mucho espacio y no tenía ni un duro, así que amontoné todos los desechos en el lateral de la pared de una cuadra, en la zona sombreada y de vez en cuando lo movía o lo humedecía. Esta es una buena opción si no tienes nada de dinero, ya que el compost sale igual. De todas maneras no es muy recomendable si tenéis vecinos, ya que aunque no huele mal (por mucho que cueste creerlo, no huele a nada), y creo que en ciertas comunidades autónomas les pueden meter una multa; por no decir que si tienes gallinas sueltas irán a la montañita de compost a destruir y esparcir todo. Así que la mejor opción es hacer un contenedor. Pero no  se preocupen se pueden hacer y salen realmente baratos.

Montón de compost. Imagen de: http://eljardindemargarita.blogspot.com




La forma más sencilla dentro de los contenedores de compost elaborados sería el compostador de malla: debemos utilizar una malla metálica (la reja de gallinero va muy bien) para hacer un contenedor, el fin de la malla será mantener amontonado el compost, dejar paso al oxígeno para garantizar el proceso y evitar que las gallinas destrocen la pila. Si se desea se pueden utilizar unos palos para hacer las esquinas al compostador, agarraremos la malla a los palos e iremos introduciendo los restos dentro. No hay que olvidarse de dejar el cierre de la malla un tanto libre para poder abrir por ahí una vez esté hecho el compost, de esta manera será mucho más cómodo vaciarlo.


Compostador de reja sencillo.
Compostador portátil: madera y malla
También podemos hacer nuestros depósitos de compost reciclando un palet, en la granja ahora mismo hay un compostador de reja sencillo y uno que hicimos con unos palets que encontramos tirados junto al rió seguramente alguien los tiro ahí, así que matamos dos pájaros de una pedrada, limpiamos el rió y aprovechamos los palets para hacernos nuestro compostador.  
La forma mas sencilla es unir los palets por las esquinas, no tiene más ciencia. En nuestro caso añadimos una puertecita con unas bisagras para que a la hora  de vaciarlo nos resultase más fácil
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Adjunto algunas imágenes de la web:

Imagen de: http://www.abarrataldea.org
Imagen de: http://www.jardineria.pro


Como pueden ver todo depende de las ganas que tengamos de trabajar, lo curiosos que seamos, y que nos familiaricemos con las herramientas que estemos utilizando, etc.

Imagen de:http://www.infojardin.com

También podemos construir el compostador con ladrillos o bloques:

Compostador de ladrillos.

También se pueden reutilizar materiales u objetos que tengamos por casa y que no usemos, como cajas de plástico de botellas, cajas de madera de la fruta, cubos de basura viejos, etc. Hay que recordar que el oxígeno debe circular libremente para que el proceso de compostaje se realice con éxito, por lo que si usamos algún contenedor que no tenga ventilación deberemos hacer agujeros. 

Otras pocas imágenes de la web:

Compostador cubo basura. Imagen: emporda.wordpress.com
Compostador reciclado. Imagen: http://www.todofauna.com/

Si no disponemos de ninguna de las opciones anteriores o disponemos de algunas medias... siempre podemos combinar técnicas:

Compostador sistema de tres compartimentos, materiales ladrillo y madera.

Compostador sistema de tres compartimentos, materiales ladrillo y madera.

Ya saben, solo hay que utilizar el ingenio y lo que tengan a la mano que ya no ocupen.

Gracias por comentar!

El huerto de hortalizas en parcelas pequeñas

Un gran número de aficionados a las plantas encuentran en el laboreo de su huerto la mejor recompensa para sus gustos. Sin perjuicio en las obtenidas en la tenencia y cuidado del jardín, las satisfacciones que nos brinda el cultivo de las plantas hortícolas en una pequeña parcela de nuestro terreno son muy grandes.
La preparación de la tierra, la siembra, las plantaciones, el seguimiento de los ciclos de las plantas y la recolección son experiencias muy interesantes que nos darán una enorme satisfacción.
El que las plantas puedan desarrollarse en un clima determinado, no quiere decir que éste sea el adecuado.El horticultor no debe conformarse con que las plantas cumplan su ciclo biológico. sino que este ciclo sea óptimo ya que de esta forma obtendrá mejores rendimientos.
De ahí la importancia que tiene el conocer las condiciones ambientales, clima, suelo, etc., de nuestra parcela. Debemos conocer asimismo la dirección de los vientos dominantes de la región así como sus velocidades para poder proteger nuestros semilleros y plantas por medio de setos y cortavientos. Las hortalizas requieren por lo general un clima cálido-templado, de ahí que se elijan terrenos expuestos al mediodía o poniente, nunca al norte. Si en nuestra parcela se ha construido ya la vivienda, debemos saber que el terreno queda dividido en zonas diferentes en cuanto a micro-clima se refiere.

Luz y exposición

La luz es un factor esencial para la elaboración de azúcares en las plantas; a mayor intensidad, mayor cantidad de azúcares se formarán y mejores serán las cualidades organolépticas de los frutos como son el sabor, olor, maduración, etc. De ahí que para el replanteo del huerto, debemos elegir las zonas más iluminadas de la parcela. En las regiones septentrionales, la orientación sur-suroeste es la más indicada, mientras que en las meridionales, es preferible la este-sureste.
La falta de luz va a provocar:
Alargamiento exagerado de los tallos  
Desarrollo pequeño de las hojas   
Hojas de color amarillento 
Mala formación y por consiguiente mala fructificación y maduración. De ahí que tratemos de evitar la proximidad de edificios elevados, árboles, setos de gran porte, etc. Lo ideal es, al hacer la distribución del huerto, separar las hortalizas de los frutales para impedir que éstos roben luz y sus raíces superficiales entren en competencia con las de las verduras, absorbiendo el agua y los elementos nutritivos de éstas. Se deben colocar en una parcela aparte o bien diseminados en una zona del jardín, pudiendo servir al mismo tiempo de árboles de sombra.
Parcela Tipo 1Parcela tipo 1
Figura 1Figura 2
1 Semillero ; 2 Hortalizas ; Frutales

La figura 1. corresponde a una distribución clásica de los distintos elementos que se suelen situar en una parcela. Se puede considerar como fachada principal la que corresponde a la orientación norte, y por tanto toda la zona que recae a ella se ha destinado a plantas ornamentales, mientras que la parte trasera está ocupada por las plantaciones de hortalizas y frutales.
En la figura 2. se han colocado frutales en la zona delantera por lo que en este caso se deberán seleccionar variedades de porte decorativo.
Se observará en ambos el lugar protegido ocupado por el semillero, junto a un ángulo, permitiendo la construcción de un invernadero con este fin. Las hortalizas y los frutales aunque con tino se encuentran entremezclados. El terreno adecuado para el huerto debe ser rico en elementos nutritivos, fresco, de consistencia media, con buena retención (50%) y bien drenado.
Los suelos arenosos, retienen poca agua y elementos fertilizantes, se lavan con frecuencia; necesitando aportes periódicos de los mismos; las cosechas son precoces ya que, al no retener el agua, son cálidos.
Los suelos pesados por el contrario son compactos, difíciles de trabajar, retienen mucho la humedad y los elementos nutritivos; el agua se estanca produciéndose asfixia radicular. Las cosechas son más tardías ya que son suelos fríos.

Suelos pesados

Siempre que un suelo se aleje de esas características intermedias que le hacen suelo ideal para la horticultura, debemos corregir sus propiedades.
En este tipo de suelos, la mejora se hará con aportes de estiércol, 10 Kgs./m.2 y turba, al mismo tiempo que se harán aportes de arena de río bien lavada. El sembrar legumbres, incorporándolas al terreno cuando están próximas a la floración, como abono verde es una de las mejores correcciones que le podemos hacer.
En terrenos pesados irán bien los cultivos de habasguisantescolcoliflor, así como manzanas y ciruelos.

Suelos arenosos

El problema en estos suelos, es que hay que darles cohesión para favorecer la retención de agua y elementos nutritivos; para lo cual se harán aportaciones de turba 0,5-1 Kg. por m2 y estiércol a razón de 3 a 5 Kgs. La turba y el estiércol en tierra ligera, aumentan el poder de retención.
En suelos ligeros, los cultivos de espárragosespinacaszanahorias, perejil, patatas, tomates, son los más adecuados.
Si tienen gran cohesión, cualquier árbol frutal irá bien. En las parcelas de montaña, nos encontramos que en la mayoría de los casos, toda la parcela está ocupada por la roca madre, teniendo entonces que recurrir al relleno de la par-cela con tierra vegetal, siendo necesario aportar una capa de 80-100 cm. de espesor encima de la roca madre, mezclándole materia orgánica (estiércol) a razón de 5 a 10 Kgs. por m2

Preparación del terreno

La parcela elegida para la implantación de la huerta debe tener la superficie horizontal y uniforme; en caso de que se trate de un suelo con desnivel, debernos formar terrazas, siempre orientadas de forrna que los cultivos reciban la máxima iluminación posible. Una vez se haya aplanado la superficie de cultivo se procede a dar una labor profunda, 45-50 cm. por lo general, 2 ó 3 meses antes de efectuar la plantación.
Para parcelas pequeñas se puede utilizar la azada si bien cuando se trate de extensiones grandes habrá que disponer de moto-azadas, arados, etc. Esta labor debe efectuarse siempre cuando no haya ningún cultivo y el terreno esté en sazón o tempero, es decir ni tan seco que no puedan penetrar los aperos ni tan húmedo que se adhiera a los mismos.
Posteriormente a esta labor en profundidad se procede a eliminar los terrenos, piedras, raíces de cosechas anteriores.., así como a nivelar la superficie para la cual se puede utilizar un rastrillo de púas o retovator.

División de la huerta

Una vez preparada la parcela mediante las labores precedentes, se divide en pequeñas parcelas o eras, cuya superficie sea proporcional a la cantidad que de cada hortaliza queremos cultivar.
Estas parcelas se pueden formar mediante el trazado surcos que posteriormente nos pueden servir para el riego o bien como pasillos de acceso. Estas divisiones o pasillos pueden hacerse de hormigón o gravilla, si bien no es recomendable puesto que limitamos la superficie de cada era y la superficie de cultivo. Sólo deben hacerse de hormigón los accesos a la huerta y la circunvalación de la misma.
Cada parcela debe tener como máximo 5 m2 (5 x 1) ya que así se facilitan las operaciones de plantación, recolección y de cultivo en general. Se calcula que para suministrar las verduras que una persona necesita en un año, son necesarios 100 m.2 de huerta; si consideramos una familia  formada por 4 personas, se necesitan 400 m2, lo que supone una mayor dedicación; no sólo fines de semana, y unas disponibilidades de terreno que se alejan del aficionado medio.
Lo que se diga en este apartado va encaminado para parcelas de huertas no superiores a los 60/80 m2, que son los que nos pueden servir de distracción y regocijo en nuestros ratos libres.

martes, 1 de septiembre de 2015

CONTINUACIÓN DE LA ELABORACIÓN DEL COMPOST

Tendiendo en cuenta que muchos de los residuos orgánicos que generamos a diario en nuestros hogares tienen un gran potencial, es necesario implementar medidas que nos permitan darles un manejo más apropiado y que contribuyan a disminuir, de manera significativa, el volumen de los residuos llevados a los rellenos sanitarios y por consiguiente a proteger el medio ambiente.

                                     

Una forma de hacerlo es a través del compostaje. El compost, es un abono de gran calidad obtenido a partir de la descomposición aeróbica de residuos vegetales que mejora la estructura del suelo y ayuda a la absorción del agua y los nutrientes por parte de las plantas es un proceso que puede realizarse en casa y a bajos costos. 
Para fabricar compost en el hogar se necesita un contenedor (compostera) que puede ser fabricado por nosotros mismos o también se puede adquirir en el mercado. Hay páginas Web en donde te enseñan a cómo construir una compostera casera de manera sencilla y económica.

La materia prima que se debe utilizar para la producción consta de residuos vegetales como frutas, verduras, cáscaras de huevo, bolsas de té, que a diario consumimos y botamos a la basura; hojas y ramas, chips de madera, tallos, paja, pasto seco, flores marchitas, que podemos encontrar en parques o en nuestro propio jardín. Igualmente cartones, papel higiénico, papel kraft, pañuelos desechables. Debe tener en cuenta que la carne, huesos, lácteos y comida frita o con aceite no sirven para hacer compost.

                          

Una vez se tienen los residuos se introducen en la compostera alternando capas de vegetales frescos y capas delgadas, de 3 o 4 cm, de material seco (aserrín, cartón, cenizas, pasto, etc.) Los residuos vegetales deben picarse en partes pequeñas ya que así el proceso de descomposición será más rápido; los trozos grandes tardan más tiempo.


De igual manera es necesario mantener la temperatura de la compostera entre 33-55ºC y una humedad entre el 40-60%. En invierno póngala al sol protegida del viento y en verano a la sombra. Cada 15 días debe revolver la mezcla con una pala o herramienta con punta ya que esto ayudará a oxigenarla y a acelerar el proceso.
Transcurridos de 2 a 3 meses los residuos del fondo se habrán transformado en compost joven. Abra la puerta inferior de la compostera y retire el compost que ya esté listo; lo identificará fácilmente por su textura esponjosa, su color oscuro y por la ausencia de restos visibles de residuos vegetales.
Debe tener en cuenta que el compost es un poderoso fertilizante por lo que debe aplicarse solo en pequeñas cantidades, aunque con cierta frecuencia. Para un macetero, solo se necesita de un puñado y para un jardín una delgada capa superficial.

                             


Dar vuelta a la compost, dejando la parte inferior hacia arriba y la exterior hacia abajo.









sábado, 22 de agosto de 2015

COMO INICIAR TU PROPIO HUERTO EN CASA

En el jardín de tu casa, en una pequeña porción de terreno que poseas o fácilmente en una caja de madera, puedes crear un huerto y cultivar tus propios alimentos. Esta actividad, además de ser gratificante, ya que puedes sembrar para comer lo que a ti te gusta y alimentarte orgánicamente, también es una buena manera de incluir a toda la familia, y hasta los más pequeños pueden aprender para lograr una vida más ecológica.

Esta es una sencilla guía para empezar a montar tu propio huerto:

PARA COMENZAR...


  • Planifica bien qué vas a cultivar, y cuánta cantidad de frutas o vegetales plantarás. Averigua cuáles serían ideales en tu clima y en el espacio que posees. Escoge el lugar a conciencia.
  • Ten cuidado con las herramientas, intenta conseguir elementos de buena calidad: lo agradecerás en el futuro. Los materiales de trabajo son indispensables para un buen resultado.
  • Si es tu primer huerto, escoge plantas de tamaño pequeño, productivas y resistentes como hierbas y especias.
  • Recuerda adquirir semillas en tiendas especializadas en productos agropecuarios y aprovecha para preguntar en el sitio o a personas con experiencia sobre los cuidados apropiados, la cantidad a plantar, entre otras. A medida que realizas tu cultivo, comparte información y semillas!
  • Agrupa los elementos que necesitas y ordena la tarea para que todo esté dispuesto y no tengas imprevistos.

DESPUÉS DE ESTO NECESITARÁS:


  • Una caja de madera (Las de fruterías o supermercados) o de mimbre.
  • Escoger un espacio con sol, si es a tierra directa
  • Plástico para forrar
  • Una pala
  • Un rastrillo
  • Guantes gruesos de trabajo
  • Una regadera
  • Tierra
  • Compost (aprende a hacerlo!)


¿TODO ORGANIZADO? ¡MANOS A LA TIERRA!


  • Limpia bien la caja, lima los bordes y forra el interior con el plástico (haciendo previamente agujeritos para que el agua no se acumule). Puedes barnizar el exterior si quieres, pero recuerda no usar aerosoles.
  • Coloca la tierra en la caja y haz surcos en la tierra con el rastrillo
  • Esparce en los surcos las semillas.
  • Tapa ligeramente las semillas con la tierra y riégala.
  • Si el cultivo es en tierra a cielo abierto, recuerda limpiar bien la porción sobre la que trabajarás y delimita las zonas por tipos de semillas.

YA TIENES UN HUERTO, PERO ¿CÓMO LO CUIDAS?


  • Recuerda que los huertos que no son realizados en tierra a cielo abierto necesitan mayor riego y abono.
  • Puedes abonar con compost fabricado con restos orgánicos. Consulta cuales son las indicaciones pertinentes para tu cultivo según el clima y tipo de siembra.
  • Controla cómo evolucionan y presta atención a los insectos que vienen a alimentarse de tu cultivo. Y mantenerlo libre de malezas que pueden afectar al cultivo. Tanto en cultivo en caja como en tierra directa.



Realizar esta actividad lleva su tiempo, por lo que es importante que tengas paciencia. Sin embargo, es una actividad muy gratificante y verás como mejora tu vida a medida que crecen tus plantas. Este es el tiempo de la naturaleza y estás aprendiendo a integrarte a ella de un modo orgánico. Cuida tu huerto, lee, investiga aún más, espera sus frutos y disfrútalos!




COMO HACER COMPOST EN CASA


En el planeta se generan millones de kilos de residuos orgánicos, gran parte de los cuales proviene de nuestros hogares. Aprender a hacer compost no es tarea compleja y ayuda a mantener los deshechos fuera de los vertederos de basura, las calles y principalmente, es una manera sencilla de aprender a reutilizar, reducir y reciclar; en otras palabras, una nueva cultura.

¿QUÉ ES Y CÓMO HACER COMPOST?


La fabricación de compost se trata básicamente de disponer los diferentes residuos de forma tal que la naturaleza los procese orgánicamente. Nuestra función en este proceso es ayudar a organizar y acelerar este proceso, logrando reducir la emisión de gases tóxicos que desprenden estos deshechos a la atmósfera, ayudando a limpiarla y obteniendo un excelente fertilizante que aportará gran cantidad de nutrientes a nuestros cultivos caseros y jardines. Mediante la fabricación casera de compost podemos aprender a reutilizar lo que producimos y desechamos; este puede realizarse en un jardín, un balcón y hasta debajo del lavaplatos de la cocina, utilizando solamente en un balde.

Los principales elementos para realizar Compost casero podrían clasificarse de la siguiente forma:
  • Residuos orgánicos Marrones, tales como hojas secas, ramas, aserrín, papel triturado.
  • Residuos orgánicos Verdes, dentro de los que se cuentan el césped recién cortado, hojas verdes.
  • Tierra, que será el componente que le dará cuerpo a la mezcla de todo lo anterior
  • Agua, que debe ser la necesaria para mantener el compost levemente humedecido, pero no encharcado.
Si vives en una casa y cuentas con espacio para realizarlo directamente en la tierra, es necesario cavar un hoyo del tamaño de la cantidad de compost que quieras obtener, (puede ser de 50 cm de profundidad aproximadamente) y hacer una capa inicial con los elementos marrones, como ramas y hojas secas. Si por el contrario vives en un apartamento y no cuentas con el espacio suficiente, en el interior de tu hogar puedes tomar un bote, hacerle pequeños agujeros en los costados para que la mezcla esté constantemente oxigenada y agregar la capa de elementos marrones. Luego de esto (tanto directamente en la tierra como al interior de tu casa) ve alternando entre residuos orgánicos verdes, marrones, tierra y un poco de agua al finalizar. Por último, cúbrelos con una tapa para mantenerlos húmedos y calientes.

El compost tarda regularmente entre tres y seis meses en estar listo, dependiendo de la época del año (temperatura ambiente), el cuidado que tengamos en su proceso y el tipo de residuos orgánicos que utilicemos, pues algunos se descomponen más rápido que otros. Por eso, es importante tener en cuenta algunos cuidados al momento de hacer compost:

Los residuos orgánicos que podemos utilizar para el compost son:

  • Frutas
  • Verduras
  • Cascaras de huevo
  • Café molido
  • Bolsitas de té
  • Plantas
  • Flores
  • Periódicos
  • Hojas secas
  • Algodón
  • Pelo (por ejemplo, aprovechar el de las mascotas)                                                 

  • Por otra parte, los residuos orgánicos que no se deben utilizar son:
    • Excrementos de animales
    • Plástico
    • Aluminio
    • Huevo (yemas o claras buenas o podridas)
    • Cualquier resto que contenga fertilizantes
    • Ningún tipo de químicos (como jabones, limpiadores, etc)
    • Aceites
    • Huesos
    • Carne
    • Pescado
    • Cenizas
Ahora, para tener en cuenta durante el proceso:
  • Es importante recordar que la mezcla no debe exponerse a altas temperaturas ni excederse en la humedad.
  • Un indicador de éxito es que el compost al tacto sea suave y compacto, que no escurra agua y que su aroma sea similar al de un “bosque”, muy fresco y silvestre.
  • Si tiene olor a podrido es porque tiene exceso de residuos orgánicos. Para solucionar esto, es importante cubrirlos para no atraer moscas y otros insectos, y reducir su humedad, pues esto demuestra que hay exceso de agua en la mezcla
  • Es útil agregar desperdicio de madera (aserrín), papel (sin exceso de tinta) o cartón. Esto ayuda a mantener la humedad estable.
  • Para facilitar el proceso, es eficaz primero triturar los residuos, así se pueden descomponer más rápido.
  • La oxigenación adecuada de la mezcla, en líneas generales, se equilibra mediante la utilización del doble de material verde que del marrón.
  • Rastrillar y mover semanalmente los residuos es una buena práctica para facilitar la integración de todos los componentes.
  • Otra opción radica en la adquisición de una composteadora, que puede encontrarse en locales de horticultura, y que son fáciles de utilizar y transportar.
  • Pueden incorporarse lombrices rojas, que realizan un proceso de reducción y descomposición más rápido, ademas de producir humus.
¡Así de simple! Es posible en nuestro día a día hacer compost en nuestro hogar, un proceso indispensable para ser un activo colaborador de la ecología del planeta.

Espero les sea de utilidad.




miércoles, 19 de agosto de 2015

Los Beneficios de la Lombriz Roja Californiana

Se define como lombricultura, al estudio y actividades relacionadas con la cría y producción de la lombriz de tierra, y a la transformación por medio de estas (lombriz) de residuos orgánicos biodegradables en fertilizante.
El humus de lombriz esta mas que demostrado su función de procesar fertilizante orgánico, una opción mas para la sociedad de darles una cultura de separación de basura orgánica e inorgánica, y no solo eso si no que su propia basura puede hacerse fertilizante. 
El humus de lombriz sirve para mejorar la calidad del suelo, le incorpora textura y fertilidad, mejora la actividad microbiológica para encontrar nutrientes como Nitrógeno, atrae los elementos del suelo que se pierden cuando se aplica fertilizantes químicos para llevarlos cerca de las raíces. El abono de vaca es muy favorable para el suelo pero al momento de ser procesado por las lombrices incrementa su porcentaje de N,P,K, 5 veces mas.


En breve te explico te ofrezco.

Por solo $200 un pie de cría inicial de 3kgs de sustrato con lombriz, un manual con información y como construir un criadero, cuidados y crianza de la lombriz, además de asesoría, y seguimiento del mismo.



En la información encontraran indicaciones de como se comporta la lombriz, sus cuidados, y lo que requiere como es el pH, la humedad, la temperatura ideal para reproducirse, etc. Y si en un momento dado usted tiene alguna consulta o problema tendrá mis datos para contactarme y así aclararle sus dudas.


ESTO SIGNIFICA QUE 3 KG DE LOMBRIZ CON SUSTRATO
Cada criador que vende lombriz tiene sus propias medidas y son muy respetables un kilo, una pala, etc.

Lo que manejamos es. 

Peso de Lombriz. 0.3 a 0.7gr.
1cm3: 3 a 5 lombrices
1kg = 60% de sustrato + 40% de lombriz


ENTONCES Yo te ofrezco 3 kg = 1.2 kg de lombriz.